🧬 La tecnología de ARN mensajero (ARNm), que permitió desarrollar vacunas contra la COVID-19 en tiempo récord, está siendo aprovechada para crear vacunas personalizadas contra el cáncer. Empresas como BioNTech y Moderna, en colaboración con el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido, lideran esta iniciativa, respaldadas por inversiones millonarias y avances en secuenciación genética e inteligencia artificial.
🔬 Estas vacunas analizan genéticamente tumores individuales, identifican sus mutaciones y fabrican dosis personalizadas que entrenan al sistema inmunológico para detectar y combatir recurrencias específicas del cáncer. Los ensayos clínicos, que comenzaron en varios países, incluidos España, están en tercera fase, con el objetivo de obtener aprobación en 2025.
💡 Se espera que estas vacunas complementen los tratamientos tradicionales, como la quimioterapia, y sirvan para prevenir recidivas tras cirugía. La confianza pública en la tecnología de ARNm tras la pandemia está acelerando su aplicación en oncología, marcando un hito en la medicina personalizada.
